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WASHINGTON, D.C. (26 de junio de 2025) – El Instituto McCain de la Universidad Estatal de Arizona (ASU) y la Fundación del Legado de James W. Foley coorganizaron esta semana un evento virtual para conmemorar los 10 años de la emisión de la Directiva Política Presidencial 30 (PPD 30), que puso en marcha la empresa estadounidense de recuperación de rehenes al crear las entidades gubernamentales encargadas de dirigir la recuperación de estadounidenses retenidos como rehenes o detenidos injustamente en el extranjero.
Los panelistas, entre los que se encontraban funcionarios y ex funcionarios de la administración, socios de ONG y familiares de los detenidos, debatieron las formas en que la empresa de recuperación de rehenes ha tenido éxito, identificaron los obstáculos que impiden el retorno de los cautivos estadounidenses y exploraron lo que debe hacerse desde las perspectivas legislativa y estructural para disuadir y prevenir la toma de rehenes.
“La recuperación y disuasión de rehenes y detenidos por error sigue siendo una de las principales cuestiones bipartidistas de la actualidad, como lo ha sido durante la última década”. dijo Pedro Pizano, director adjunto de la Iniciativa John McCain para la Libertad de los Presos Políticos y de los Programas de Democracia Global del Instituto McCain. “Ahora es el momento de trabajar para mejorar nuestras prácticas durante los próximos diez años para recuperar a todos los detenidos injustamente, apoyar más a las familias y detener a quienes se los llevarían en primer lugar. Entre estas medidas está mejorar las herramientas de disuasión, como designar a los Estados reincidentes, como Venezuela, Irán, China y Rusia, y otros, como “Estados patrocinadores de detenciones ilícitas o ilegales””.
“Para el presidente, la recuperación de rehenes es una cuestión personal: es la prioridad número uno para el presidente”, dijo el Ayudante Adjunto del Presidente de Estados Unidos y Director Principal de Lucha Antiterrorista, Dr. Sebastian Gorka. “Las cosas que la Ley Levinson, que el PPD 30 hizo posibles, ahora se están haciendo posibles en la práctica gracias al compromiso del presidente Trump”.
“A nadie de la comunidad de seguridad nacional le gusta pensar que está fracasando en su trabajo, pero quedó dolorosa y abundantemente claro que [antes del PPD 30] las familias de los rehenes estadounidenses no confiaban en sus interlocutores del gobierno de EE.UU., y las familias no tenían la sensación de que sus voces fueran suficientemente escuchadas”. dijo Nicholas Rasmussen, fundador de la Beca de Seguridad Nacional y Contraterrorismo del Instituto McCain y ex director del Centro Nacional de Contraterrorismo de EEUU (NCTC). “Había ira y rabia que era necesario compartir con la administración, y fue la dosis de agua fría que obligó a la administración [Obama] a recapacitar sobre una política que no estaba dando resultados para el pueblo estadounidense. Esto abrió la puerta a empezar de nuevo y nos ha llevado a este lugar mejor”.
“La exposición mediática en Estados Unidos es fundamental -no puedo cuantificar la importancia que tuvo en la liberación de Sagui [Dekel-Chen] o de cualquier otro rehén-, pero los funcionarios de la administración estadounidense y los miembros de alto rango del Congreso nos dijeron repetidamente que el alto nivel de exposición mediática que pudimos producir les mantuvo centrados en la recuperación de los rehenes por encima de los más de cien otros asuntos en los que están centrados. No se puede exagerar la importancia de mantener comprometida a la administración”, declaró Jonathan Dekel-Chen, padre del ex rehén estadounidense-israelí Sagui Dekel-Chen.
“Después de que se llevaran a mi padre, recuerdo estar en la Casa Blanca en diciembre de 2010: sólo había cuatro personas en la sala durante nuestra reunión, y nadie fue capaz de guiarme a través de lo que se dijo o de lo que estaba pasando. Desde el PPD 30, ahora tenemos coordinadores de participación familiar para ayudar a las familias a procesar lo que acaba de ocurrir, qué hacen las personas de la sala, qué preguntas hacerles y cómo hacer que la reunión merezca la pena. Sólo la idea de que las familias tengan ahora a alguien que esté con ellas y pueda ayudarlas a orientarlas sobre cómo aprovechar estas reuniones para que sus seres queridos vuelvan a casa es muy impactante, y gracias al PPD 30″ , dijo Doug Levinson, hijo de Robert Levinson y miembro del consejo asesor de la Iniciativa John McCain para la Libertad de los Presos Políticos.
El Instituto McCain ha puesto en marcha recientemente la Iniciativa John McCain para la Libertad de los Presos Políticos (FPPI, por sus siglas en inglés), con el fin de proporcionar apoyo vital a los estadounidenses y a los titulares de tarjetas de residencia que se encuentran retenidos en el extranjero como presos políticos o rehenes, así como a los disidentes, presos políticos y rehenes de otras naciones retenidos en todo el mundo por regímenes represivos.
Inspirado por el senador John McCain, un firme y apasionado defensor de las personas detenidas injustamente por luchar contra la tiranía, y su experiencia como prisionero de guerra durante más de cinco años, el FPPI proporcionará un apoyo fundamental a los prisioneros individuales y a sus familias. Esto incluye contactos con los principales responsables de la toma de decisiones al más alto nivel del gobierno estadounidense, asistencia directa de profesionales expertos, comunicaciones estratégicas para galvanizar el apoyo continuo a la liberación de los presos y apoyo posterior al regreso para ayudar a las personas a reaclimatarse tras su detención. Más información AQUÍ.
Acerca del Instituto McCain de la Universidad Estatal de Arizona
El McCain Institute es una organización no partidista inspirada en la dedicación al servicio público del senador John McCain y su familia. Formamos parte de la Universidad Estatal de Arizona y tenemos nuestra sede en Washington, D.C. Nuestros programas defienden la democracia, fomentan los derechos humanos y la libertad, y capacitan a líderes con carácter. Nuestro poder único para convocar a líderes de todo el espectro político mundial nos permite tener un impacto real en los retos más acuciantes del mundo. Nuestro objetivo es la acción, no la palabrería, y al igual que el senador McCain, luchamos por crear un mundo libre, seguro y justo para todos.
Acerca de la Universidad Estatal de Arizona
La Universidad Estatal de Arizona ha desarrollado un nuevo modelo para la universidad de investigación estadounidense, creando una institución comprometida con el acceso, la excelencia y el impacto. ASU se mide a sí misma por aquellos que incluye, no por aquellos que excluye. Como prototipo de una New American University, ASU realiza investigaciones que contribuyen al bien público, y ASU asume la mayor responsabilidad por la vitalidad económica, social y cultural de las comunidades que la rodean.